Este ejercicio consiste en sujetarse a una barra fija por encima de nosotros y elevarse a uno mismo hasta alcanzar la altura de la barra. Se considera que la elevación es adecuada al pasar la barra con la cabeza.
Se trata de un ejercicio de gran complejidad y, en realidad, no todas las personas pueden hacerlo. Lo primero a lograr es alcanzar suficiente fuerza en los brazos antes de poder hacer dominadas.
Para fortalecer los músculos de los brazos debemos hacer series de flexiones. La cantidad de las mismas depende de nuestras condición física. Una vez hayamos conseguido más fuerza en los brazos podremos probar con las dominadas.
Recordemos que se trata de un ejercicio en el que se progresa. No se puede empezar a hacer muchas dominadas desde un principio. Sobre todo si no se cuenta con la fuerza necesaria para hacer este ejercicio.
Lo habitual es que empecemos a hacer pocas dominadas y vayamos aumentando el número poco a poco. No debemos forzar los músculos más de la cuenta.
Además, es importante mantenerlos los brazos separados simétricamente y elevarnos lo suficiente para realizar el ejercicio de forma adecuada.
Es mejor hacer unas pocas repeticiones bien que muchas mal.